L’Albufera (Paseo en barca – Ornitología – Gastronomía)
Es imprescindible ir a visitar el lago de L’Albufera si se viene a Valencia. Los miles y miles de pájaros que viajan del norte de Europa hacia África se paran en nuestro lago durante el invierno. Un paseo en barca permite observarlos de más cerca (les prestamos prismáticos para facilitarlo) y al anochecer el paisaje y el cielo se transforman en un espectáculo único. Hay varios barqueros, que si no están acuden de inmediato, al llamar al numero de teléfono que aparece en sus pancartas. En el pequeño pueblo de El Palmar, en medio del lago, encontraran varios restaurantes que cocinan excelentes especialidades valencianas, como la Paella y el Ail i pebre, le recomendamos uno excelente a orillas del lago, por su gastronomía y su entorno paradisíaco, se llama “Nou Racó”. Además se puede completar el paseo con una visita al centro de información y conservación del parque natural, les recomendamos que se informen de los horarios de apertura antes de ir. El recorrido, en su último trayecto, permite entrar en el mundo de los arrozales y los anchos paisajes que conforman el territorio entre Cullera y Sueca.
La Murta (Valle encantador con su Monasterio y su Fuente natural)
Aquí le indicamos dos sendas de dificultad baja (como ejemplos porque La Murta tiene muchos recorridos señalizados) y perfectas para dar un paseo relajado, incluso con niños pequeños y carrito. Desde la Fuente de la Murta podemos enlazar con otros senderos.
Senda botánica (3,5 km):
Se puede empezar este itinerario circular en el Punto de Información. Pasada la casa del guarda, cogemos una derivación a la derecha ascendente, que nos lleva a la umbría de la Murta. Esta zona contiene abundante vegetación por su orientación hacia el norte, que le reduce las horas de exposición solar. A medida que avanzamos la pista se va estrechando y convirtiendo en senda hasta llegar a la bifurcación del Pas de Pobre. Pero nosotros cogemos la senda de la izquierda que nos llevará en lento descenso hacia la pinada que hay frente al Puente de Felipe II, donde está la entrada al recinto del antiguo monasterio.
A la izquierda del monasterio, junto a la Casa Vieja de la Murta (antigua hospedería), encontraremos el jardín “romántico”. Aquí podemos apreciar otro hábitat vegetal dentro del paraje: la naturaleza al servicio del hombre. Tras descansar, seguiremos el camino que pasa por delante de la casa. Tendremos a nuestra izquierda el Barranco de la Murta, con la vegetación propia de una zona húmeda. Continuando el paso por la pista llegamos a la solana y a los antiguos campos de cultivos, los hay abandonados e invadidos por la vegetación mediterránea propia del lugar. Actualmente estas tierras de labor están repobladas de especies autóctonas. Habiendo llegado a los Corrales tomaremos el camino de la izquierda e iremos bajando hacia el Punto de Información, donde finaliza el recorrido.
Senderismo por la montaña de corbera
La Casella (Valle de gran belleza con su reserva de ciervos)
El valle de la Casella es un enclave de una magnificencia exquisita, cubierto por un tupido manto de campos de naranjos, sobresalientes palmeras y antiguas casonas construidas por la burguesía local entre finales del siglo XIX y principios del XX, en la llamada época de oro de las exportaciones de naranja.
Como su hermano, el valle de la Murta, tiene su encanto particular, la reserva de ciervos. Es muy fácil verlos tranquilos y confiados. Le recomiendo ir con prismáticos para distinguir mejor a sus crías detrás de los matorrales.
A pocos kilómetros adentro del valle se encuentra el bar de la Casella, donde poder restaurarse después de una caminata entre uno de los muchos recorridos de senderismo.
Senderismo por la montaña de corbera
El Manantial de Baldoví y La Montanyeta dels Sants (en Sueca)
Los “ullals” son manantiales de aguas subterráneas de excelente calidad, en ellos han sobrevivido especies de fauna y flora prácticamente desaparecidos en nuestros humedales. Además, en estos enclaves se desarrolla la conservación de los hábitats naturales de la fauna y la flora.
Es un lugar idóneo para observar las aves, está abierto al público respetuoso de la naturaleza salvaje. Allí encontraran un escondite de madera para no asustar a la fauna mientras estarán observándola. Es un verdadero placer ver como los patitos van siguiendo a sus madres entre las cañas y los juncos. Es muy fácil verles a la puesta del sol cuando regresan a sus nidos para pasar la noche. El cielo se tinta de tonos calidos, es una maravilla. No olviden pedirnos unos prismáticos antes de ir, se los prestaremos con mucho gusto.
A dos pasos verán un afloramiento rocoso de dimensiones importantes, como una isla en medio de los arrozales, es la Muntanyeta dels Sants. Además de poder visitar su Hermita y pasear por sus jardínes pueden disfrutar de unas vistas espectaculares.
La Laguna El Estany
El Estany o laguna de transición entre el marjal y el litoral, es una laguna de aguas salobres, situada al sur de la desembocadura del río Júcar, abierta al mar, con gran diversidad biológica de especies animales y vegetales que le hacen merecedor de su inclusión en el catálogo autonómico de zonas húmedas.
Es un lugar apacible y tranquilo, visitado por el aficionado a la pesca, sobre todo de caña, con su barquita de madera tradicional y auténtica en medio de la laguna, que le da un toque romántico al paraje. Rincón entrañable para degustar la gastronomía típica de la localidad. Libre de edificaciones, la naturaleza del paisaje conservada aún prácticamente virgen, le da mucho valor a este pintoresco lago.
Un paseo por la senda a orillas del Estany, bajo los árboles a lo largo de casi dos kilómetros y un anochecer espectacular sea cual sea la estación del año, son dos verdaderos placeres que sería una pena perderse.
Le recomendamos comer a orillas del lago, en una terraza cubierta del restaurante Casa Salvador o del restaurante Picanterra, una delicia que no se olvida.
La playa del Brosquil
La playa del Brosquil, muy tranquila se sitúa en la desembocadura del pintoresco Estany, la claridad de sus aguas, su tranquilidad y las vistas sobre toda la bahía son sus principales aliciente. Aunque la existencia de reputados restaurantes donde degustar, sin duda, buenos arroces y sabrosos pescados frescos en una terraza a orillas del lago, con los patitos nadando, también vale la pena.
El rio Júcar y el Assut de Riola
El Assut es una palabra de origen árabe que significa “barrera”. Es una presa, pero se suele conservar la palabra de origen árabe cuando corresponde a tomas de reducidas dimensiones y de origen musulmán. El azud es parte importante en los sistemas de regadío tradicional, y junto a las acequias forma un sistema hidráulico que, además de servir para regar los campos, antiguamente servía para llenar los lavaderos y bebederos para los animales y también se aprovechaba la fuerza del agua para hacer funcionar los molinos.
Aquí le detallamos uno de los bonitos recorridos que proponemos por la mota del río Júcar.
La mota del río es una construcción diseñada para proteger a los pueblos de las avenidas del río Júcar. Su anchura y sobre todo su elevación de unos 5 metros, la convierten en un lugar ideal para pasear, caminar o correr, con vistas panorámicas sobre toda La Ribera, los campos de naranjos, de arroz y la montaña en el horizonte.
Un ejemplo de recorrido
Polinyá de Xúquer – Azud de Riola – Polinyá de Xúquer, 8,86 km
Desde la rotonda de la entrada al pueblo de Polinyá de Xúquer viniendo de Corbera, verán un aparcamiento desde donde se puede acceder a La Mota del río y por arriba de ella hasta el pueblo de Riola. Siempre bordeando el río, podrán disfrutar de las vistas de la comarca desde lo alto de este privilegiado camino. El paisaje es tan verde i bucólico que no les dejara indiferentes, seguro. Hagan un descanso en el azud para observar a los pájaros y a los patos, para oír el susurro de las hojas… y cuando ya estén cansados de tanto bienestar, podrán emprender la vuelta por el camino El racó que une Riola a Polinyá, caminando entre huertos de naranjos. Podrán ver algunas casonas de campo cerca al camino, que datan de hace más de un siglo y que a menudo han sido muy bien restauradas.